El presidente norteamericano pronosticó hoy que su nuevo plan de exploración espacial llevará a los estadounidenses a Marte, durante la generación actual. "Yo espero estar ahí para ver eso", afirmó
La predicción osada de Obama buscó responder a los críticos, incluidos varios ex astronautas, quienes consideraban que los cambios recientes anunciados por el mandatario propinarían un duro golpe al programa de misiones espaciales tripuladas de Estados Unidos.
En el Centro Espacial Kennedy, de donde partieron las misiones estadounidenses a la Luna hace décadas, Obama dijo estar "comprometido al 100% con la NASA y su futuro" . Delineó los planes de gasto federal para que más empresas privadas se involucren en la exploración espacial, ante el final próximo del programa de los transbordadores.
"Queremos dar un salto al futuro", no seguir con el mismo camino que antes, dijo Obama, en busca de garantizar a los funcionarios de la NASA que las misiones del país seguirán, pese al retiro de los transbordadores espaciales.
Obama reconoció que existen críticas a los cambios drásticos que anunció en el rumbo de la agencia espacial. Sin embargo, "la realidad es que nadie está más comprometido que yo con los vuelos espaciales tripulados y con la exploración del espacio por parte de los seres humanos".
"Vamos a hacer eso de una manera inteligente; no podemos seguir haciendo las mismas cosas viejas que antes", añadió.
El presidente señaló que para el 2025, la nación contará con una nueva nave espacial, "diseñada para largos viajes que nos permitan comenzar las primeras misiones tripuladas de la historia que vayan más allá de la Luna, hacia el espacio más profundo".
"Comenzaremos enviando astronautas a un asteroide por primera vez en la historia. Para mediados de los 2030, creo que podremos enviar seres humanos para que orbiten Marte y hacer que regresen sanos y salvos a la Tierra. Y luego vendrá un aterrizaje en Marte", avizoró.
Obama dijo que el programa espacial no es un lujo, sino una necesidad para el país.
Destacó que el Centro Espacial Kennedy ha inspirado al país y al mundo durante medio siglo. Agregó que la NASA representa el significado de ser estadounidense, de "llegar a nuevas alturas y de alcanzar todo aquello que es posible". Como tal, el programa espacial no está cerca de su ocaso.
El mandatario buscó explicar por qué abortó el plan de su antecesor George W. Bush para volver a la Luna, prefiriendo un complicado sistema de vuelos públicos y privados hacia otros lugares del espacio. Los detalles de ese sistema no se han revelado.
"Hemos estado ahí antes", dijo Obama sobre los alunizajes de hace décadas. "Hay mucho más espacio por explorar".
El presidente señaló que su gobierno apoyaría la continuación de las misiones tripuladas al espacio, "no sólo con dólares, sino con objetivos claros y un propósito más grande".
El plan espacial de Obama confía en las empresas privadas para los vuelos a la Estación Espacial Internacional, dándoles casi 6.000 millones de dólares para construir sus propios cohetes y naves.
Amplía también en un lustro la vida útil de la estación espacial e inyecta miles de millones de dólares a la investigación, para desarrollar a la postre nuevas naves gubernamentales, propulsadas por cohetes, para las futuras misiones a un asteroide cercano, a la Luna, a los satélites de Marte o a otras partes del espacio. Esas misiones serían pasos previos a la llegada del hombre a Marte. Fuente: EFE
La predicción osada de Obama buscó responder a los críticos, incluidos varios ex astronautas, quienes consideraban que los cambios recientes anunciados por el mandatario propinarían un duro golpe al programa de misiones espaciales tripuladas de Estados Unidos.
En el Centro Espacial Kennedy, de donde partieron las misiones estadounidenses a la Luna hace décadas, Obama dijo estar "comprometido al 100% con la NASA y su futuro" . Delineó los planes de gasto federal para que más empresas privadas se involucren en la exploración espacial, ante el final próximo del programa de los transbordadores.
"Queremos dar un salto al futuro", no seguir con el mismo camino que antes, dijo Obama, en busca de garantizar a los funcionarios de la NASA que las misiones del país seguirán, pese al retiro de los transbordadores espaciales.
Obama reconoció que existen críticas a los cambios drásticos que anunció en el rumbo de la agencia espacial. Sin embargo, "la realidad es que nadie está más comprometido que yo con los vuelos espaciales tripulados y con la exploración del espacio por parte de los seres humanos".
"Vamos a hacer eso de una manera inteligente; no podemos seguir haciendo las mismas cosas viejas que antes", añadió.
El presidente señaló que para el 2025, la nación contará con una nueva nave espacial, "diseñada para largos viajes que nos permitan comenzar las primeras misiones tripuladas de la historia que vayan más allá de la Luna, hacia el espacio más profundo".
"Comenzaremos enviando astronautas a un asteroide por primera vez en la historia. Para mediados de los 2030, creo que podremos enviar seres humanos para que orbiten Marte y hacer que regresen sanos y salvos a la Tierra. Y luego vendrá un aterrizaje en Marte", avizoró.
Obama dijo que el programa espacial no es un lujo, sino una necesidad para el país.
Destacó que el Centro Espacial Kennedy ha inspirado al país y al mundo durante medio siglo. Agregó que la NASA representa el significado de ser estadounidense, de "llegar a nuevas alturas y de alcanzar todo aquello que es posible". Como tal, el programa espacial no está cerca de su ocaso.
El mandatario buscó explicar por qué abortó el plan de su antecesor George W. Bush para volver a la Luna, prefiriendo un complicado sistema de vuelos públicos y privados hacia otros lugares del espacio. Los detalles de ese sistema no se han revelado.
"Hemos estado ahí antes", dijo Obama sobre los alunizajes de hace décadas. "Hay mucho más espacio por explorar".
El presidente señaló que su gobierno apoyaría la continuación de las misiones tripuladas al espacio, "no sólo con dólares, sino con objetivos claros y un propósito más grande".
El plan espacial de Obama confía en las empresas privadas para los vuelos a la Estación Espacial Internacional, dándoles casi 6.000 millones de dólares para construir sus propios cohetes y naves.
Amplía también en un lustro la vida útil de la estación espacial e inyecta miles de millones de dólares a la investigación, para desarrollar a la postre nuevas naves gubernamentales, propulsadas por cohetes, para las futuras misiones a un asteroide cercano, a la Luna, a los satélites de Marte o a otras partes del espacio. Esas misiones serían pasos previos a la llegada del hombre a Marte. Fuente: EFE
0 comments:
Publicar un comentario